"¿Quién no cree ahora? Os lo dije. A París". La voz de Usman Garuba, característica allá donde las haya, retumbaba. El ala-pívot, garra y engranaje, era el que mejor ejemplificaba el asunto. España estará en los Juegos Olímpicos de París 2024 tras vencer el Preolímpico de Valencia y Garuba repetía un mensaje que ya se escuchó durante el último milagro de 'La Familia', el de creer y confiar. Tras derrotar a la temible Bahamas siendo un equipo. Y apuntando a una cita universal en la que España tiene una ventaja: no hay nada que perder.
¿Quién no cree ahora? Os lo dije. A París
Usman Garuba
España, ante todo, es un equipo. Existen individualidades, representadas por el excelso Lorenzo Brown, MVP de la final ante Bahamas (18+4+4 con 4/5 T3) y principal sostén para la ventaja. Santi Aldama, mejor jugador del torneo (17 puntos y 8 rebotes con 23 créditos de valoración de promedio) y con el paso adelante para ser el faro del futuro en cualquier escenario internacional. O Willy Hernangómez, que en ataques se fue hasta los 18,3 puntos y lideró en la complicada batalla del los dos minutos igualados ante Finlandia en la semifinal. Pero la base es el equipo. La defensa, que organizó una trampa para el talento de Bahamas. La buena decisión en el reparto del balón, con unos 10 triples anotados por partido.
"Es la forma de ayudarse, de compartir la pelota, la actitud, la cohesión y el saber estar fuera del campo. Esa es nuestra fuerza. Podemos perder estrellas, y quizá alguno llegue y alcance ese estatus en el futuro. Mientras tanto, todo lo que tenemos que hacer es que el equipo gane", recordó Scariolo.
Su siguiente tarea es conformar la lista de 12 para los Juegos, con el regreso de Álex Abrines como posibilidad. Se quedó en Valencia y cada vez fue aumentando más el ritmo en la recuperación en los entrenamientos. Debería estar Juancho Hernangómez, que solo jugó ocho minutos contra Líbano, y será fundamental para abrir el campo y poder encontrar tres torres en el campo a la vez.
Podemos perder estrellas, y quizá alguno llegue y alcance ese estatus en el futuro. Mientras tanto, todo lo que tenemos que hacer es que el equipo gane
Sergio Scariolo
El quinteto del rendimiento
Pese a las bajas y la buena nota en conjunto, Scariolo también encontró el quinteto que más rédito le da para competir al máximo. Es uno que mezcla juventud con veteranía porque están Aldama junto a Willy o Garuba, junto a Brown, Llull (que bien podría ser Abrines si está para abrir más el campo) y Rudy. Funcionó ante Finlandia, Bahamas y puede dar el impulso. Aunque el techo también está claro que no es el de otras selecciones gigantes. "El equipo siempre compite", repite el italiano. Aunque el salto ante los Juegos será más grande todavía.
Allí, claro, se une la parte especial de Rudy. Por sus sextos juegos, hombre récord en baloncesto. "Se lo prometí a mi padre", recordó emocionado al finalizar el partido. Y por lo que transmite a los demás. "Nos dio las gracias y es emotivo. Nos dice que es importante para él, pero también para nosotros porque vamos a vivir una experiencia única", añadió el MVP Aldama.
Los Juegos, una trampa
Pero los Juegos son otra película. El nivel de exigencia es máximo y más en partidos en los que nadie se puede dejar llevar porque dos terceros se clasificarán a la fase final del Accor Arena de París. Lo bueno, sí es que hay algo de medirse a Grecia, Canadá y Australia, es que ninguno de los otros dos grupos presentan a un tercer clasificado que podría tener tanto rendimiento como los del grupo de la muerte de España.
Queremos ganar por 40 o 50 siempre
Kevin Durant
En el de Estados Unidos (el C) es francamente complicado ver a un tercero con opción si el USA Team, tal y como prometen, dan palizas a diestro y siniestro. "Queremos ganar por 40 o 50 siempre", anunció Kevin Durant.
España abrirá fuego con Australia (11:00 horas). De sobra conocidos, tras dos ejemplos en el partido por el bronce de Río 2016 (88-89) y la histórica semifinal del Mundial 2019 (95-88). Pero con menos fuerza que antaño, a pesar de presentar ocho NBAs. Dyson Daniels (Hawks), Dante Exum (Mavericks), Josh Giddey (Bulls), Josh Green (Hornets), Joe Ingles (Wolves), Jock Landale (Rockets), Patty Mills (Heat) y Duop Reath (Blazers) son sus nombres, pero ninguno es estelar. Sí buenos complementos. En pista, Mills y Giddey son sus generadores, pero sin tantos puntos como hace cuatro o cinco años. El físico, por descontado, es superior. Pero España podría maniobrar ante su acierto.
Grecia viene de arrasar en el Preolímpico de Atenas. Pleno de victorias (4-0), derrotando a competentes selecciones como Eslovenia (96-68) y Croacia (69-80) y sin tener que desgastar al estelar e indefendible Giannis Antetokounmpo (22,7 puntos en 22,5 minutos). Lanzan bien (43,5% en T3) y su base más allá de 'Anteto', los Mitoglou, Calathes, Walkup o Papagiannis está en más de nueve puntos por choque. Sería un emparejamiento complicado para España... aunque Grecia lleva muchos años sin un gran resultado (3º en el EuroBasket de 2009).
Canadá es candidata al oro. Eliminó a Estados Unidos por el bronce del último Mundial, eliminó a España y une a su equipazo liderado por Shai Gilgeous-Alexander, 3º en la última carrera por el MVP de la NBA, a Jamal Murray, el mejor socio de Jokic en Denver. Y sigue con Dillon Brooks, Lu Dort o Dwight Powell para asegurarse en faceta defensiva. España pudo competir contra ellos, pero se quedó sin pólvora ni ideas al final.
"No pensamos todavía en París. Solo en agradecer el trabajo al equipo", dijo Scariolo. Pero ya están allí. En los Juegos, sin nada que perder y con una clasificación en Valencia que dio alas a una España seria y consistente en los dos lados de la cancha. Volverán a su hábitat, los Juegos. No fallan desde 1996 y volverán a ser un actor principal.
